Receta de Bizcochitos de grasa

Ingredientes:

Harina 0000 350 g
Mantequilla 100 g
Agua aprox 250 cc
Sal 1 cdta
Polvo para hornear 3 cdtas

Preparación:

Comenzamos mezclando los ingredientes secos: harina, sal y polvo de hornear.

Mezclamos levemente y realizamos un hueco.

Volcamos aqui en el centro la mantequilla blanda o derretida. Agregamos la mitad del agua y el resto la vamos agregando a medida que la vamos precisando. Preferentemente tratemos que el agua esté a temperatura ambiente o tibia.

Del centro hacia afuera y con la ayuda de un cornet, vamos tomando los ingredientes para formar una masa. Agregamos agua de a poca cantidad para no excedernos.

Cuando la masa se vaya formando, trabajamos la mezcla con las manos para realizar este paso más fácilmente.

Luego, la trabajamos apenas sobre la mesada para terminar de homogeneizar la preparación y asegurarnos que todos los ingredientes estén integrados.

Con un cortante circular de una medida de 3 cm de diámetro aproximadamente, comenzamos a cortar los bizcochos. Intentamos cortarlos uno al lado del otro, bien pegaditos, para evitar unir la masa y volver a estirar y cortar. Además, si realizamos muchas veces este proceso la masa se torna menos maleable y más elástica y cuesta que quede la forma tal como la cortamos. Esto se debe a que el gluten que compone la harina comienza a activarse por la hidratación y el amasado.

Acomodamos los bizochos en una placa a la que no es necesario engrasar, dada la cantidad de materia grasa que posee la masa. Los ubicamos con una pequeña distancia entre sí para que no se peguen al inflarse, durante la cocción.

Luego pinchamos con un tenedor cada bizcocho para que crezcan, pero sin deformarse.

Horneamos en horno fuerte, aproximadamente 10-12 minutos. Veremos que además de crecer, se dorarán y formarán una base. Retiramos del horno y nos contenemos de probarlos aunque sea por los primeros 15 minutos: ¡si los comemos en ese momento nos va a doler la panza!
Secretitos

Son exquisitos y sabrosos, pero es preferible cocinarlos en el día que se van a consumir, dado que después de varias horas pierden esa textura crocante y tienden a humedecerse. Podemos reemplazar la misma cantidad de mantequilla por margarina o grasa.

Podemos reemplazar la harina comun más polvo de hornear, por la harina leudante, en la misma cantidad.