Ingredientes:
10 o 12 claras (excelente ocasión para usar las claras que uno guarda)
2 cucharadas de agua fría
1/2 cucharadita de jugo de limón
1 cucharadita de esencia de vainilla
Unas gotas de esencia de almendra (opcional)
1 y 1/2 cucharadita de crémor tártaro
Una pizca de sal
1 taza de harina
1/2 taza de azúcar impalpable
1 taza de azúcar
Preparación:
Tamizar la harina 4 veces (¡sí! recuerden que queremos que quede muy muy esponjosa). Vuelva a tamizarla 2 veces más junto con el azúcar impalpable y reservar.
Aparte tamizar 3 veces el azúcar.
En la batidora poner las claras, el agua, el jugo de limón, el crémor tártaro, la esencia de vainilla y de almendras y la sal. Batir hasta que se forme un merengue con cuerpo (se puede reconocer cuando se hacen picos pero tienen que quedar blandos, no tiene que quedar muy rígido ni muy blando, como para que los picos se desarmen). Agregarle al merengue el azúcar molido que tamizamos previamente. ¡Cuidado! Hay que incorporarlo de una cucharadita por vez.
Seguir batiendo el merengue hasta que se vuelva más consistente y tenga brillo.
Incorporar al merengue la harina y azúcar impalpable. Usar movimientos envolventes.
Poner la preparación en un molde (¡esta vez no hay que enmantecar o enharinar!). Con una espátula hacer 3 círculos concéntricos bien profundos en la preparación. Esto sirve para que no quede aire en la masa.
Cocinar la torta por 11 minutos en horno moderado, bajar entonces el fuego al mínimo por otros 20 o 30 minutos más.
Desmoldar y dejar enfriar.
Ponerle una bocha de helado arriba, frutillas azucaradas y ¡a disfrutar!
Via: saborgourmet
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martes, 21 de abril de 2009
Receta de Tortas con helado
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